Hoy,
5 de Mayo, es el primer domingo de mes y como ya lleva sucediendo desde hace
años, se celebra el día de la madre.
Al
contrario de lo que muchos creen, “el día de la madre” no fue ideado con un fin
comercial, sino que se debe a una fecha de celebración y agradecimiento a la Madre Tierra.
Inicialmente
se celebraba este día el 8 de diciembre, haciéndolo coincidir con el día de la Inmaculada Concepción ,
pero se cambió de fecha, para separar conmemoraciones.
Son
más de 70 países los que celebran el día la madre, 40 de ellos, al
igual que en España, lo hacen el primer domingo de Mayo.
Así,
que desde Un mundo de burbujas queremos hacer un pequeño homenaje a todas las
madres luchadoras que día a día lo dan todo por sus hijos. Nos hemos puesto un poco sensiblonas y hemos decidido escribir una carta con la que seguro que muchos de vosotros os sentís identificados...¡ porque madre no hay más que una!
“Querida
mamá:
Es
difícil lograr que las palabras surjan sin que se dibuje una sonrisa en mis
labios.
Todavía
siento el calor de tus brazos al acunarme y tranquilizarme cuando el hambre y
el sueño atacaban. Tu dulce voz susurrando palabras de aliento y amor. El olor
de tu piel, ese tan tuyo que al recordarlo me transporta a otros tiempos.
Recuerdo
mis primeros pasos, como sujetabas mi mano para que la caída fuese menos
dolorosa.
Los
primeros días de colegio y nuestras separaciones. Momentos duros que siempre
conseguías enmudecer.
Cómo
me gustaban esas tardes de paseo, de confidencias, de miradas cómplices.
Poco
a poco fui creciendo y tú creciendo conmigo, acompañándome en cada paso y
guiándome para llegar a ser la mujer que soy hoy.
Es
por ello que quiero agradecerte todos y cada uno de los instantes que hemos
compartido juntas. Los buenos y los malos. Las sonrisas y las lágrimas. Los
amores y desamores. Las ilusiones. Las esperanzas.
Poco
a poco he ido abriendo mis alas, creando mi mundo, andando camino…
Has
llorado en silencio, mostrando tu mejor cara para que nadie viera el dolor en
tu interior. Has hecho todo lo que estaba en tus manos por lograr mi felicidad,
porque con ello tú también eras feliz.
Siempre
me has dado sin esperar nada a cambio, haciendo que en los momentos difíciles,
en los instantes de dolor, solo estuviésemos tu y yo.
Todos
los buenos momentos quedaran para siempre dentro de mí, todo lo que me has
enseñado y las ganas de vivir que me has transmitido.
La
vida nunca es fácil, tampoco diría que sea difícil, pero te enfrenta a
situaciones que a menudo no estamos preparados para afrontar. Un pasito de
hormiga se convierte en uno de gigante. Pero ahí estas tú para darme aliento,
para ayudarme a no rendirme, para darme
el empujón o el abrazo cuando sea necesario, para mimarme, para consentirme,
para enseñarme, para reñirme, para ayudarme…para quererme. Ahí seguirás estando
tú para que, por mucho que pasen los años, siempre siga siendo tu niña.
Tu
pequeña, que te quiere. “
Dicho esto sólo nos queda desearos un felicísimo día de la madre, lleno de amor, mimos y muchos, muchos abrazos.
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